Vamos de compras mamá
-Vamos, Lito, ya es hora de marchar.
-¿Vamos a pasear?
-No, vamos a comprar.
Has crecido, también as engordado y tu ropa pequeña se ha quedado.
-Oye, mamá, ¿y a mi Osito?, ¿qué le compras a él?
-Tu osito no necesita ropa, ¡va vestido de piel!
-¡No me gusta esa chaqueta!
¡Prefiero una camiseta!
-¡Esto, me está pequeño, me hace daño!
¡Tengo frío con el traje de baño!
El pantalón es gordo, me gusta, da calor.
¿Tendrán uno igualito, pero en otro color?
-¡Ponte derecho, Lito!
-¡Se me ha caído el Osito!
La camiseta es grande, parece un camisón...
¡Déjame que me pruebe el otro pantalón!
-¿Le gusta la de rayas? ¿Prefiere de lunares?
Tenemos calcetines, le enseñaré unos pares.
-Enséñemelos luego y veré si hacen juego.
-La camiseta roja tiene un color bonito, le irá bien a su niño,
¡un chico tan rubito!
-Talla grande. No pequeña. La mediana iré a buscar...
Lito tiene que probarse, que probarse sin parar.....
Se aburre y está cansado.
-¿Que te pasa? ¡estás bailando!
-¡Es que se me está escapando!
Se lo diré a la señora.
-Dice que hay que ir por ahí...
¡Cuantas cosas hay aquí!
¡Hay un avión de juguete!
¿Habrá también un retrete?
¡Y, mira, allí hay otro osito y mi juego favorito:
un tren con muchos vagones...
Y hay muñecas y balones y un bebé y sus biberones.
Y hay cunas con edredones...
-Mamá ha venido a buscarme y ya tengo que marcharme..
¡Adiós, volveré otro día!
Comprar ropa es aburrido, es aburrido y cansado.
Mamá dice: Te convido, voy a comprarte un helado.
Y Lito sale encantado.
Marchan hacia la parada.
-No hemos olvidado nada -dice mamá satisfecha-,
toda la compra está hecha:
pantalones, camisetas, calcetines, dos chaquetas...
-Mamá, ¿y mi osito querido?
¡Mamá, Osito se ha perdido!
-¡Vaya, lo hemos olvidado!
Lito, eres muy descuidado, ¿en donde te lo has dejado?
-¡No sé...! ¡yo quiero encontrarlo!
Volveremos a buscarlo.
Buscan por todos los lados, por arriba y por abajo.
Mamá busca por encima.
-¿Estará entre las camisas?
-mamá revuelve con prisas.
-Ese osito que han perdido no está en mi bolso escondido.
Lito esta muy disgustado. ¿Osito dónde ha quedado?
Lito está casi llorando.
De pronto Lito oye un ruido.
-¿Oyes, mamá, ese sonido?
¡Osito, si está dormido, respira con un ronquido!
Y mira ¡el muy dormilón debajo del edredón!
-¡Qué alegría da encontrarlo después de tanto buscarlo!
Mamá levanta al osito todavía adormilado.
-¡Osito, mal educado, qué susto le has dado a Lito!
Creyó que te habías perdido...
¡Estaba muy preocupado!
¡Y tú en la cuna metido tranquilamente dormido!
-No le regañes, mamá, es pequeño, está asustado...
Yo estoy tan contento ahora porque lo hemos encontrado
y porque puedo tenerlo aquí conmigo abrazado...